Los buques necesitan agua de lastre para mejorar su estabilidad y equilibrar su carga; ésta se transporta en tanques, el doble fondo, los tanques de proa y popa y los espacios laterales.
De acuerdo con el Convenio internacional para el control y la gestión del agua de lastre y los sedimentos de los buques aprobado por la OMI (Organización Marítima Internacional) de 2004, se deben utilizar procesos mecánicos, físicos y químicos para tratar el agua de lastre.
Generalmente se utilizan válvulas de mariposa para tanques de lastre; ARI puede suministrar una amplia gama de productos para el tratamiento del agua de lastre.